Ran no tenía padres, por la sencilla razón que había nacido de una piedra en forma de huevo. Una anciana llamada Nainai lo había recogido, educado, mimado. Una noche, Ran conocie a un demonio que vive en el bosque.
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y facilitar la navegación. Si continúa navegando consideramos que acepta su uso.