La obsesión de Enrique VIII por concebir un varón es uno de los episodios más cruciales de la historia medieval. Para conseguirlo, se divorció de Catalina de Aragón, mató a Ana Bolena y rompió toda relación con la Iglesia católica. En 1553, mientras Eduardo VI, el único heredero varón de Enrique, agonizaba, Inglaterra estaba a punto de vivir el «antinatural» reinado de una mujer, ...
25,90 €