Viajeras extranjeras en Castilla La Vieja y León. Siglo XIX

Viajeras, curiosas y observadoras; mordaces, quisquillosas e ingeniosas; adelantadas a su época sin dejar de ser convencionales algunas de ellas, pero invisibles o perdidas hasta ahora para el lector en español (también para sus compatriotas). Solteras, casadas, algunas embarazadas, o con hijos, divorciadas, con o sin acompañamiento, viajan en cualquier medio de transporte (mulas, bicis, en diligencia o a pie y en tren) y recorren de punta a cabo Castilla la Vieja y León. Todas son extranjeras (europeas y norteamericanas), católicas, calvinistas firmes, protestantes o convertidas al catolicismo, filomasonas, dadas al misticismo unas y escépticas otras, mujeres de recursos, ricas herederas, acomodadas burguesas, aristócratas, periodistas y escritoras, muchasde ellas con aficiones notables por la pintura y la escultura. En íntimos diarios, correspondencia particular, relatos, con pretensiones literarias en ocasiones, y reportajes, la inquietud de todas estas exploradoras rescatadas nos devuelve una imagen desconocida de la región, agridulce, desenvuelta de tópicos, con justos elogios pero también con inesperados rechazos y crueles comentarios llegado el caso sobre el carácter regional, la gastronomía, la moda, el arte, la arquitectura y los caminos.